No más de 2.000 personas se concentraron este sábado en Palma para protestar contra la masificación turística, una manifestación que recorrió varias calles emblemáticas de la ciudad hasta llegar al paseo del Borne.
La portavoz de la asamblea de movimientos sociales 23-S, Margalida Ramis, expresó al comienzo de la manifestación que «estamos viendo que el turismo se nos va de las manos» y este acto es un «clamor social para dar un empujón a un Govern que ahora entendemos que será más sensible para iniciar políticas al margen del turismo».
Un total de cuatro organizaciones dirigieron unas palabras a todos los manifestantes desde un escenario situado en plaza de la Reina, mientras se coreaban lemas como «sin límites no hay futuro», «no queremos pisos turísticos», «no queremos vivir del turismo» o «las calles serán siempre nuestras».
Por su parte, la representante del GEN GOB de Ibiza, Neus Prats, declararó que el turismo se ha convertido en un «fuego descontrolado y que se devora a sí mismo».
«El pequeño comercio desaparece, suben los alquileres y cada día somos más pobres. No estamos creando riqueza, creamos pobreza. Es hora de decir basta», ha expresado Prats.
En esta línea, Ramis ha reiterado que reclaman «valentía» para «poner límites y pensar la sociedad al margen del turismo» y, así, «acabar con la dependencia del monocultivo intensivo turístico».
Por último, la portavoz de 23-S concluyó diciendo que si el Govern cree «que no hay suficientes signos para incrementar las políticas de freno a esta dependencia del turismo, nosotros pensamos que sí y por eso nos manifestamos».