La llegada del otoño ha permitido diseñar nuevos talleres y experiencias para seguir descubriendo la magia de esta isla. La tercera edición de «Amb les mans Mallorca» viene cargada de experiencias con artesanos, firmas y ganaderos que experimentan una filosofía de producción ética y respetuosa con nuestro entorno.
Amb les mans al apiari fue un taller, en el que Martí Mascaró nos recibió en Son Alzines (Escorca), para descubrirnos el mundo de las abejas en una finca en la que se mantienen los principales valores naturales y culturales de Mallorca. Todos los asistentes se llevaron una experiencia de inmersión total en su manera de entender y trabajar la apicultura y un tarro de Mel Caramel, de la cosecha propia de Martí Mascaró.
Después de un buen rato de charla sobre su manera de vivir y entender la apicultura, el anfitrión colocó un traje de apicultor a cada uno de los alumnos, de esta manera se pudieron acercar al hogar de las abejas.
Un apiario es el lugar donde se encuentra el conjunto de colmenas. La ubicación de los colmenares en una finca beneficia el aumento de sus cosechas porque favorece la polinización. Este proceso hace posible y multiplica la producción de semillas y frutos.
La experiencia fue mel, literalmente. Se sabe lo importante que son estos insectos para la biodiversidad mundial, que de las abejas depende gran parte de la producción alimenticia. Sin ellas no hay polinización; ni comida ni animales. Y tampoco humanos.