Como viene siendo costumbre, Artà ha sido la localidad más madrugadora de entre los 30 pueblos mallorquines que celebran Sant Antoni. Centenares de jóvenes ataviados con camisas blancas y pañuelos rojos han invadido las calles para disfrutar del primer ‘ball’ de los ‘dimonis’ -en Mosca y en Ferriol- que han iniciado su recorrido a las 9 en en punto de la mañana, entre una gran expectación. El colegio Na Caragol, el Instituto y la residencia para personas mayores han sido algunas de sus paradas.

























































