Los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, así como sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, y la reina Sofía asistieron, como cada año, a la misa que se celebra en la Catedral de Palma con motivo del Domingo de Resurrección, y que oficia el obispo titular de la Diócesis de Mallorca, Sebastià Taltavull.
A su llegada a las puertas del templo, centenares de personas -vecinos de Palma y turistas- les ovacionaron y sacado multitud de fotografías con sus teléfonos móviles y cámaras de fotos.
La Familia Real llego a las puertas de la Catedral de Palma en un Volvo XC90 de color negro conducido por el Rey Felipe, vestido con un traje azul marino, camisa azul claro y corbata amarilla.
Del asiento del copiloto bajo la Reina Letizia, con americana azul, leggings azul marino metalizado y tacones stiletto azul marino. La reina Sofía, por su parte, se ha dejado ver con un vistoso traje de chaqueta con falda de color rosa fucsia y zapatos y bolso del mismo color, gris metalizado.
Las pequeñas de la familia, la princesa Leonor y la infanta Sofía han sido las últimas en salir del coche con la ayuda de su madre. Ambas vestían vestidos y bailarinas similares, la mayor de color azul marino y la pequeña de rojo.
Ni don Juan Carlos, ni las infantas Elena y Cristina han acudido a esta ceremonia, como viene siendo lo normal en los últimos años.