El pasado 19 de julio, volvió a ser un templo para los verdaderos amantes del techno. Colgando el cartel de SOLD OUT, Mørk volvió a demostrar que su propuesta va mucho más allá de una simple sesión: aquí se celebra la historia, el presente y el futuro de la música electrónica.
El ritual comenzó con Alex Losa, residente de Mørk, marcando el pulso de la pista de 00:00 a 01:00. Después tomó el relevo MZDZ, DJ y productor madrileño, pieza clave en el cerebro de Mørk, que mantuvo la tensión de 01:00 a 02:00 con un set cargado de crudeza y atmósferas hipnóticas.
A partir de ahí llegó el momento más épico de la noche: el B2B improvisado entre Alex Losa y MZDZ estaba desatando la pista cuando, de pronto, Jeff Mills apareció en cabina. El maestro de Detroit observó la energía, la música, la conexión real que se respiraba… y en lugar de cortar la sesión para comenzar su set, decidió sumarse al B2B. Durante unos minutos, los tres compartieron mezclas, beats y una vibra única que electrizó a todos los presentes. Fue un instante de comunión irrepetible: pasado, presente y futuro del techno fundidos en un solo momento.
Entonces Mills tomó el relevo definitivo y cerró la noche como solo él sabe hacerlo: desplegando su legendaria TR-909, esa caja de ritmos que domina como nadie, dando forma en directo a un viaje hipnótico al Techno más puro. La pista explotó cuando sonó el himno eterno “The Bells”, himno generacional convertido en ritual colectivo que recordó por qué Jeff Mills sigue marcando la pauta década tras década.
La noche fue pura vibración: música, energía y comunidad, los pilares de Mørk, llenaron cada rincón de Wave. No se trató solo de bailar, sino de formar parte de algo real, donde la música vuelve a ser el centro y el ritual se respeta de principio a fin.
Esto es solo un capítulo más en la historia de Mørk. El próximo será el 2 de agosto, con otro icono: Oscar Mulero. Más techno, más verdad, más comunidad.
