Rosana Núñez, conocida artísticamente como Rosana Nun, empezó a interesarse por el arte de mezclar discos siendo tan solo una adolescente. Paso a paso, disco a disco, empezó a labrarse una carrera que le ha permitido pinchar en países como Alemania, Bulgaria, Ecuador, México, Países Bajos, Perú o Polonia. A las puertas de esta nueva y prometedora temporada estival, hemos hablado con ella para conocer un poco más sobre el pasado, presente y futuro de una de las deejays más importantes de la escena mallorquina.


¿Cómo y cuándo empezaste a pinchar?
Empecé con un radiocasette y un tocadisco ‘robado’ de la torre de mi madre que transporté del salón hasta mi habitación (risas). Yo tendría unos 15 años.
A los 18, me regalaron mis primeros Technics. Luego, me compré el mezclador y el resto del equipo para empezar a practicar en casa. Recuerdo ir a comprar a Discos Oh! y también a Virus. Como soy una persona muy ordenada, los tengo perfectamente clasificados.
Con el paso del tiempo, me he tenido que adaptar a los nuevos formatos. Así me pasó con los reproductores de cd’s cuando las salas empezaron a quitar los vinilos porque daban problemas con los acoples. Después me compré el Traktor hasta ahora que uso USB.
Mi primer bolo fue en el Rockefeller, que estaba situado en primera línea de s’ Arenal. Después empecé a pinchar en pequeños clubs. Era mi hobby porque yo en realidad soy técnico de sonido. De hecho, hice un máster de radio en Madrid y luego empecé como locutora en Flaix FM. Allí, una cosa llevó a la otra y Óscar (Romero) me animó a probar en una de las fiestas de la emisora. Yo, por entonces, era más de tener mi cabina en mi casa con mis amigos y poco más.
La verdad es que ha ido todo muy poco a poco, ha sido un trabajo muy constante.
¿Quiénes han sido o son tus influencias?
Cuando yo empezaba a salir, más o menos a los 16 años, en Mallorca se escuchaba mucho house y mucho techno. Era un momento, creo yo, en el que se inculcó la música electrónica a la gente joven… y no lo que se está ofreciendo ahora, si bien reconozco, que la culpa también puede ser de la oferta, que puede no ser lo suficientemente atractiva.
Como influencias, destacaría a Jeff Mills y también a Laurent Garnier, al que llevo años siguiendo. También Mistress Barbara, Ben Sims, Cristian Varela y Christian Smith. A mí me gusta el techno divertido y alegre.
En el house, deejays como Roger Sánchez y el rollo del tribal que había antes.

¿Con que estilo te sientes más cómoda?
Ya sé que no es muy popular, pero ahora mismo con el minimal deep tech. Es el rollo de Rumanía. Sin duda, es el estilo que más me llena pero sé que no se puede afrontar en según qué sesiones.
Tú, que me has escuchado, ya sabes que soy una persona que bailo mucho (risas) y que te puedo poner una canción muy fresca y luego una cañera. A mí lo que me gusta es ver a la gente divertirse y sonriendo.
¿Eres más de día o más de noche?
Soy más de día. Y es qué de noche, a veces, me cuesta mucho aguantar hasta la hora de salir después de levantarme pronto durante toda la semana. Creo que esto es una de las cosas más duras de este trabajo. La gente cuando sale de marcha, se va a cenar y se va a tomar copas de lado a lado. En un momento, se hacen las dos de la mañana.

¿Cuánto tiempo dedicas a la búsqueda de nueva música?
Pues como mínimo, una hora al día. A ver, me explico. Hay días que a lo mejor no te pones, pero al siguiente dedicas tres horas. Eso sí, de cada 100 canciones que escucho escojo solo una. Esa es la media. Y es que al reproducir una canción, en pocos segundos ya se si me gusta o no.
Con tantos años detrás de los platos, imagino que tendrás muchas anécdotas…
Una vez llegué a pinchar a un sitio en el que la mesa era de directo y no tenía preescucha. Evidentemente, no te diré el nombre del local (risas).
En otra ocasión, estaba pinchando en Pachá de Palma cuando, de repente, empezó a salir humo de la mesa debido a un cortocircuito. Tuvimos que apagar la música y cambiar corriendo de mesa. Y había mucha gente. Menos mal que la cabina era muy alta y apenas se me veía. Parecen que las hacen para personas de 1,80. Incluso los altavoces están colocados para ellos y eso supone un problema para el resto, que tenemos que ponernos de puntillas.
Por cierto, ¿cuál ha sido el set de tu vida?
Uff, déjame pensar. No sé si fue la vez que mejor he pinchado, pero guardo un gran recuerdo del Mallorca Live Festival de 2019. Y eso que coincidí con Jamiroquai. Si no recuerdo mal, mi horario era de 21 a 22.30 horas mientras que el empezaba a las 21,30.
Evidentemente, a medida que se acercaba su actuación, yo iba notando que el espacio, que por cierto era una pasada, se vaciaba. Y lo entendí, ya que él era una de las estrellas del cartel. Además, ¿Cómo les iba a pedir, incluso a mis amigos, que se quedarán a escucharme a mí en lugar de ir a ver a Jamiroquai que iba a venir aquí una vez en la vida?
Pues bueno, a los diez minutos la gente empezó a volver a mi escenario. Cuando veo los vídeos, con todo lleno de gente, todavía se me ponen los pelos de punta. Siempre recordaré que cuando acabé mi sesión, la gente empezó a aplaudir. Fue muy emocionante.

Cambiando de tema… ¿Qué opinas sobre el derribo de los chiringuitos de playa?
Este un tema que enfada mucho. No creo que los chiringuitos perjudiquen a nadie. Los de la Platja de Muro, por ejemplo, dan trabajo a mucha gente. ¿Por qué no podemos compartir los espacios? ¿Por qué no quitan las hamacas de delante de los hoteles?
Yo me pregunto… Y el Govern ahora… ¿Qué va a hacer? ¿Ayudará a esas personas que se quedan sin local y sin trabajo? Creo que con esta decisión van a hundir a mucha gente.
Se están cargando la isla (en alusión al Govern). No se puede hacer nada. En esta isla falta tolerancia y empatía. Yo, por ejemplo, no soy fanática del fútbol. Pero respeto que la gente celebre los triunfos, aunque tenga que aguantar gritos y pitos de los coches durante toda la noche.
Los deejays de aquí tenemos que viajar fuera para ir a eventos en condiciones porque en esta isla te privan de ellos. Y es una pena por la economía que podría generar.
¿Y de la persecución de las fiestas privadas?
Aquí se ponen leyes, y tú lo sabrás bien (risas), que no tienen ni pies ni cabeza. Creo que hay que proteger el empresario que haga las cosas de forma legal pero las medidas han de ser las apropiadas.
Yo creo que esto viene provocado por la situación que hemos vivido durante estos dos últimos años debido a las fiestas que se han organizado al margen de los clubs.
El problema es que tiene que haber tolerancia por parte de las autoridades. Tiene que haber ‘afters’ y libertad horaria. En muchos lugares de Europa, como Berlín, te puedes levantar por la mañana e irte de marcha tranquilamente.
La libertad horaria evitaría conflictos en la calle. Las peleas se generan al cerrar las discotecas cuando la gente está en su punto más álgido.
Además, creo que tendrían que estar en polígonos, donde no hay gente ni mucho menos niños. Las discotecas no pueden estar en las ciudades conviviendo con los vecinos. Somos latinos y no hablamos bajito. Y la gente aquí duerme con las ventanas abiertas.
La solución es sencilla: que el Govern ofrezca a los propietarios poder convertir su club en vivienda y darle una licencia musical para un polígono.
La gente va a seguir escuchando música electrónica sí o sí. Y habrá escena, quieran o no quieran.

Tras dos años marcados por la pandemia… ¿Cómo se presenta este verano?
La verdad es que el inicio de la pandemia que pilló en un muy buen momento profesional. Fue un golpe muy duro de realidad ya que, de repente, todo se paró. Si yo lo pase mal, no me quiero ni imaginar los empresarios del ocio nocturno que apenas han recibido ayudas.
Afortunadamente, parece que lo peor ya ha pasado. Creo que me espera un muy buen verano. De lo que te pueda contar (risas), me apetece mucho la fecha de este próximo sábado en el Origen Fest que tendrá lugar en Son Fusteret con Wade como cabeza de cartel.
A principios de agosto, estaré pinchando en el Brunch In The Park de Barcelona y a mediados del mismo mes, en el festival Aquasella que se celebra en Asturias.
Además, me podéis escuchar en mis programas de radio: Roxsound en Who Electronic Radio, cada martes, de 17 a 19 horas. Y también, los viernes de 23 a 00 horas, en Underground vibes by Rosana Nun en Das Insel Radio Mallorca.
¿Hasta cuándo te ves pinchando?
Pues no lo sé. Hasta que siga disfrutando en la cabina como hasta ahora. Quiero disfrutar de la profesión, pero también de la vida.
FAST CHECK
- Un deejay: Sam Divine (Manchester)
- Un productor: Shonky, uno de los tres de Apollonia
- Un tema: ‘The Bells’ de Jeff Mills
- Otro que nunca falte en tu maleta: “Hydra” de Binaryh
- Un club: Hopetose (Berlín)
- Un festival: Sunwave Festival (Croacia)
- Una comida: Arroz a la cubana
- Una bebida: Vino tinto
- Una película: ‘Matrix’
- Un lugar para perderse: Budapest (Hungría)