Esta exposición está organizada por la Obra Social “la Caixa”, el Museu Nacional d’Art de Catalunya y el Arxiu Nacional de Catalunya. La exposición se centra en cuatro aspectos del trabajo fotográfico de Gabriel Casas, uno de los fotógrafos del país más importantes de los años treinta.
En primer lugar, la realidad prismática de la calle: desde una carrera de automóviles en un autódromo hasta el enfrentamiento entre policías y manifestantes en una huelga, de la Vía Laietana (que en aquella época era un nuevo centro de la ciudad) a los bailes más populares de la Barcelona canalla.

En segundo lugar, la exposición contempla uno de los aspectos precursores de su obra: la atención hacia los desfavorecidos y los excluidos, los conflictos sociales, que abordó, cámara en mano, para obtener imágenes de una potencia extraordinaria.
El tercer apartado conecta la fotografía de Casas con el movimiento internacional de la Nueva Visión: espacios, objetos, lo que el poeta Josep M. de Sagarra denominó “el alma de las cosas”, reflejada en imágenes sorprendentes y puntos de vista inéditos.
Y por último, la exposición se cierra con la gente. Casas fue un maestro del retrato que reflejó una forma moderna de vivir. Hombres y mujeres de acción, dinámicos, dispuestos a intervenir en la vida pública, escribiendo, compitiendo, trabajando o haciendo política. Lejos, en cualquier caso, de los retratos estáticos de estudio, muy populares en aquella época.