El fin de las vacaciones y la vuelta a la rutina puede afectar directamente nuestra salud capilar por factores propios de la climatología y las alteraciones en el ritmo diario.
“Tras los cambios de estación es muy común que esta situación se presente; es una alteración del ciclo de crecimiento del cabello que desencadena una caída brusca y difusa, pero reversible”, explica la Dra. Fabiola Mastromatteo, cirujana capilar deMC360.
Los elementos externos como el sol, el salitre del mar o el cloro de la piscina, sumado a la sudoración del cuero cabelludo, el estrés postvacacional y la propia renovación natural del pelo desencadena una caída puntual que, de acuerdo con la Dra. Mastromatteo, “se puede frenar o disminuir con complejos vitamínicos y tratamientos”.
Esta caída suele durar tres meses, periodo en el que el pelo retoma su ritmo de crecimiento normal, “pasando nuevamente de la fase telógena (caída) a la anágena (crecimiento). que se recupera de forma rápida y efectiva gracias al tratamiento adecuado”, explica la doctora.
Durante esta fase es posible aplicar tratamientos que ayuden a moderar la caida y reprimir el efluvio telógeno.
En MC360, clínica líder en salud capilar, pone a disposición de los pacientes distintos procedimiento médicos, aplicables siempre según que caso, tras un diagnóstico personalizado y profesional.
Carboxiterpia: Es un tratamiento poco invasivo que facilita la renovación de las células pilosas, fortalece el cabello y cuero cabelludo, además de brindar una mejora a los problemas de caspa, caída moderada y dermatitis seborrea.
Bioestimulación capilar: Técnica de regeneración capilar, que está indicada para tratar diferentes problemas capilares y para fortalecer el cabello. Además, aumenta la supervivencia del pelo implantado tras una cirugía capilar, mejora la densidad capilar y el grosor del cabello.
Protocolo de Redensificación Capilar:Combina la acción de fármacos anti caída con proteínas para fortalecer el cabello y frenar la caída del pelo sin necesidad de tomar medicación a diario.
