Mariona Caldentey no necesita más presentación que su palmarés: campeona del mundo, delantera de la selección española, estrella del Arsenal… pero aún así, este lunes en La Revuelta de La 1, logró algo más difícil: dejar a David Broncano sin palabras. Y eso, como sabe cualquier fan del programa, no es poca cosa.
La ocasión lo merecía. Mariona acudía para presentar su autobiografía, “Mariona Caldentey: Cómo Cambiamos la Historia”, un libro que, desde el título, lanza una promesa de relato personal y colectivo. Pero si alguien esperaba una entrevista estándar, con preguntas de compromiso y respuestas medidas, no conocía a Mariona. Ni a Broncano, claro. Lo que siguió fue un intercambio chispeante, en el que la futbolista demostró que, además de goles, sabe meter zascas con precisión quirúrgica.

Una respuesta que ya es historia de la televisión
Todo empezó cuando Broncano hizo su habitual pregunta incómoda sobre dinero. Ella, sonriente, respondió con ironía: “Me acabo de hacer una casa en Mallorca. Estoy un poco recuperándome de la casa”. Broncano olfateó la oportunidad para una de sus bromas de marca registrada: “Fichaje del Arsenal. Ha entrado pasta, eh”.
Y ahí llegó el golazo en prime time.
“Menos que tú, seguro. ¿Y tú cuántas Champions has ganado?”
El plató estalló. El público aplaudió de pie. Y las redes, por supuesto, hicieron lo suyo: la respuesta ya es tendencia, con miles de menciones y memes coronando a Mariona como la MVP de la noche.
Mallorca, el refugio íntimo de una estrella global
Pero la entrevista no se quedó en lo superficial. Mariona compartió algo más que anécdotas o cifras: compartió su refugio. Mallorca no es solo su tierra natal, es su pausa en un calendario frenético. Allí, dice, vuelve siempre en sus días de descanso: “Siempre en las mismas dos o tres playas”, reveló.
Con la complicidad de su tío y primo —presentes también en el programa—, escapa en barco a calas escondidas. Y lanza un mensaje directo, cargado de amor y crítica al turismo masivo:
“Que la gente vaya a otros sitios, que Mallorca no es tan bonita”.
La frase, envuelta en sarcasmo, es también una llamada de atención sobre la masificación que vive la isla, y una defensa del valor de lo auténtico.

Uno de los momentos más serios —y reveladores— fue cuando habló de dinero, o más bien, del silencio en torno al dinero. Según Caldentey, los sueldos de las jugadoras son un tema tabú en el vestuario. No hay transparencia. No hay cifras claras. Y aunque dejó claro que “no soy millonaria”, tampoco quiso entrar en comparaciones. Otro gol, esta vez a favor de la discreción y la sororidad.
Broncano y el humor sin filtros
Como es habitual, Broncano llevó la entrevista hacia terrenos más… personales. Elogió su rendimiento con cifras concretas: nueve goles y cinco asistencias en 21 partidos. Pero luego soltó la bomba:
“¡Y aun así es menos de lo que ha follado! ¡Es increíble!”.
Lejos de escandalizarse, Mariona respondió con el mismo humor y soltura. Habló de vacaciones, de concentración con la selección, y concluyó, entre risas:
“Vamos a seguir comparando con fútbol”.
Ese desparpajo, esa risa cómplice, ese control del momento… hacen de Caldentey no solo una deportista brillante, sino un fenómeno mediático en potencia.

¿Balón de Oro? ¿Por qué no?
Broncano no pudo evitar plantearlo: ¿es Mariona candidata al próximo Balón de Oro? Su palmarés lo respalda: tres Copas de Europa, un Mundial, dos Ligas de Naciones… Y ahora, además, brilla en una liga tan exigente como la inglesa. Mariona, sin embargo, no se deja llevar por el ruido. Su foco sigue estando en el campo, en el juego, y también, cómo no, en su Mallorca.
Mariona Caldentey, más que una futbolista
El paso de Mariona Caldentey por ‘La Revuelta’ no fue solo una entrevista: fue una clase magistral de autenticidad y sentido del humor. Supo hablar de turismo responsable en Mallorca, de la realidad económica del fútbol femenino, y de su pasión por el deporte… todo mientras dejaba en evidencia a Broncano con elegancia y picardía.
Esta combinación de cercanía, reivindicación y espontaneidad hace que su figura no solo sea relevante para el deporte, sino también para el debate social actual. Y si aún no has leído su autobiografía, “Cómo Cambiamos la Historia”, es un buen momento para descubrirla.









